Crema de nata y caramelo

Crema de caramelo: La tentación del color marrón dorado de la olla

Esta crema de caramelo es un auténtico clásico que no debe faltar en ninguna cocina heladera o postrera. Ya sea como remolino en helado, como cobertura para pasteles o como un dulce para untar en pan, la crema casera le da a cada postre un toque especial. El intenso sabor del azúcar caramelizado, redondeado con la tierna mantequilla derretida y la riqueza cremosa, hacen de esta crema una compañera indispensable para todos aquellos que gustan de lo dulce, cremoso y un poco pecaminoso.

Preparación fácil con efecto sorpresa

La preparación de la crema de caramelo es sorprendentemente sencilla y, al mismo tiempo, sofisticada. Con solo unos pocos ingredientes: mantequilla, nata, azúcar, un poco de agua y nuestra Sorbet-Perfecto – se crea una crema aterciopelada que sabe como los caramelos más finos. A través de la Sorbet-Perfecto La masa de caramelo tiene una consistencia perfecta y queda maravillosamente untable.

Para helados, pasteles y más.

La crema de caramelo tiene un sabor particularmente delicioso. Variegato en helado, por ejemplo en combinación con helado de vainilla, de avellana o de chocolate. Pero también es un auténtico placer como aderezo para panqueques, crêpes, postres o simplemente comido directamente de la cuchara. Con un poco de imaginación, incluso puedes usarlos como relleno para pasteles o magdalenas.

Disfrute casero con éxito garantizado

Esta receta es la base perfecta para todos aquellos que disfrutan elaborando sus propios toppings dulces y valoran el sabor natural e intenso. Con las instrucciones claras paso a paso, tienes la garantía de tener éxito con la crema de caramelo y estarás encantado con el resultado. ¡Déjate encantar por el aroma del azúcar caramelizado y disfruta del cremoso caramelo desde tu propia cocina!